Uso externo (tópico) para Afecciones cutáneas como las canchas y micosis, Dolores reumáticos, Inflamaciones, Heridas leves.
Contiene: Aceite de oliva orgánico, Tintura de Jarilla (Larrea divaricata L.), Manteca de Cacao, Manteca de Karité y Cera de abeja.
“Me agarro en la ciática, estaba sacando paja para allá, ha de ser como un golpe de aire… ahí, si esta la jarilla se hace hervir o se muelen la hojita o lo pone en alcohol… un cuarto y le mandas un puñado de hojas… tres días…” (Leonor, V. Buena Esperanza, Las plantas en la medicina tradicional de las Sierras de Córdoba)
“Con las hojas molidas de jarilla, en aceite caliente o alcohol se prepara un cataplasma para desinflamar golpes y contusiones. Para aliviar dolores musculares aconsejan lavarse con una decocción de jarilla y eucaliptus. En caso de torceduras y esguinces resultan apropiadas las fricciones con un macerado de seis días de jarilla, romero, ruda, contrayerba, y alcanfor de jardín en medio litro de querosene.” (Las plantas en la medicina tradicional de las Sierras de Córdoba)
"En las zonas secas del país, donde abunda, no hay nadie que no conozca la Jarilla. Afamada por su poder medicinal, tiene una gran variedad de aplicaciones. Es una de las plantas más importantes para la medicina tradicional del Chaco Seco. Es una gran depurativa de la sangre pues ayuda a eliminar toxinas, lo que hace muy útil para los problemas reumáticos y de la piel. Ideal para calmar dolores, se usa como antiinflamatoria y para tratar la ciática y la artritis. Para aliviar reumatismos agudos (es decir fuertes y repentinos se hacen baños con la decocción de sus raíces y hojas. Según los campesinos es abortiva" (Plantas medicinales silvestres del centro de la Argentina, Agüero. 2017)
Uso externo (tópico) para Afecciones cutáneas como las canchas y micosis, Dolores reumáticos, Inflamaciones, Heridas leves.
Contiene: Aceite de oliva orgánico, Tintura de Jarilla (Larrea divaricata L.), Manteca de Cacao, Manteca de Karité y Cera de abeja.
“Me agarro en la ciática, estaba sacando paja para allá, ha de ser como un golpe de aire… ahí, si esta la jarilla se hace hervir o se muelen la hojita o lo pone en alcohol… un cuarto y le mandas un puñado de hojas… tres días…” (Leonor, V. Buena Esperanza, Las plantas en la medicina tradicional de las Sierras de Córdoba)
“Con las hojas molidas de jarilla, en aceite caliente o alcohol se prepara un cataplasma para desinflamar golpes y contusiones. Para aliviar dolores musculares aconsejan lavarse con una decocción de jarilla y eucaliptus. En caso de torceduras y esguinces resultan apropiadas las fricciones con un macerado de seis días de jarilla, romero, ruda, contrayerba, y alcanfor de jardín en medio litro de querosene.” (Las plantas en la medicina tradicional de las Sierras de Córdoba)
"En las zonas secas del país, donde abunda, no hay nadie que no conozca la Jarilla. Afamada por su poder medicinal, tiene una gran variedad de aplicaciones. Es una de las plantas más importantes para la medicina tradicional del Chaco Seco. Es una gran depurativa de la sangre pues ayuda a eliminar toxinas, lo que hace muy útil para los problemas reumáticos y de la piel. Ideal para calmar dolores, se usa como antiinflamatoria y para tratar la ciática y la artritis. Para aliviar reumatismos agudos (es decir fuertes y repentinos se hacen baños con la decocción de sus raíces y hojas. Según los campesinos es abortiva" (Plantas medicinales silvestres del centro de la Argentina, Agüero. 2017)